Esta capilla está situada en la cabecera de la iglesia en el lado de la Epístola, frente a la capilla de los Benavente, familia con la que estaban emparentados.
Cuando en 1516 Gaspar de Solórzano se hace cargo de la fábrica de la iglesia, esta capilla ya estaba construida. Se accede a ella a través de un arco apuntado y cairelado con flores de lis, cerrado con una reja de hierro dividida en dos cuerpos, tres calles y coronamiento con escudo de la familia, obra del cerrajero Estacio.
En ella se encuentra un retablo de pintura del siglo XVII, de arquitectura en blanco, que consta de banco, un cuerpo y ático, dividido en tres calles; con pilastras corintias de fuste estriado, adornos de guirnaldas y los escudos de la familia Palacios.
En él se encuentran tres pinturas sobre tabla de finales del siglo XVI, procedentes de un retablo anterior, obra de Gregorio Martínez: la Adoración de los Magos, en la calle central del cuerpo; el Martirio de San Andrés, parte inferior de la calle del lado del Evangelio; y el Martirio de San Pedro, zona inferior de la calle de la Epístola.
Junto a estas, tres lienzos fechados en 1635 y firmados por Juan Francisco Varuzo: San Nicolas de Tolentino y San Antonio de Padua, en la parte superior de las calles del Evangelio y de la Epístola, respectivamente. Y en el ático: San José con el Niño Jesús.